De esa forma la oposición, que aún cuenta con funcionarios y colaboradores en las distintas instituciones de servicio, desde cada una de las empresas oficiales están haciendo su aporte al descredito del gobierno que encabeza Luís Abinader.
A medida que se acerca la fecha para la celebración de elecciones de alcaldes, directores de distritos municipales y de concejales, en febrero y las presidenciales y congresuales en mayo, la oposición hace su trabajo con el único propósito que el partido el gobierno sea derrotado.
No es fortuito que en los últimos días la prensa nacional se haya hecho eco del supuesto desplome de los principales servicios públicos, los cuales según los detractores funcionaban medianamente bien en los gobiernos dirigidos por el Partido de la Liberación Dominicana.
Se habla del deterioro de servicios tales como de educación, la salud, el Sistema 9-1-1, la seguridad ciudadana, el servicio eléctrico, los medicamentos de alto costo y el Metro de Santo Domingo.
Sin embargo, el gobierno parece no tener doliente, nadie sale en su defensa, porque al parecer también el servicio de comunicación está dominado por los enemigos del gobierno.
El gobierno tiene que ponerse la pila, si en verdad quiere lograr la reelección por un nuevo periodo porque no puede quedar de brazos cruzados ante la embestida que está preparando la oposición.
No es un secreto para nadie que el presidente Luís Abinader no produjo cancelaciones masivas en las instituciones públicas, lo que ha sido aprovechado por la oposición, para de esas instituciones aportar su granito de arena para que el actual gobierno no continúe más allá de agosto del 2024.
Vemos como en el Metro de Santo Domingo existe un plan de sabotaje, para que ese servicio frase y si fracaso es un fracaso del Gobierno del PRM, como se está también ocurriendo con otros servicios que están siendo saboteados para que la población se indigne contra el gobierno.
Por: MEMO SANCHEZ